El ex técnico de Junior, Giovanni Hernández, se mostró triste por la forma en que se enteró al mediodía de este lunes que no continuaría al frente del manejo del destino de la escuadra ‘Tiburona’, cuando Fuad Char lo anunció en los medios de comunicación. 

“Me di cuenta en mi casa, almorzando, cuando viendo la televisión se da la noticia y no fue con la ética que tuvo que ser. Trabajamos con transparencia y honestidad, con un contrato de Junior. Sabía que llegaba en un momento complicado, pero con muchos ganas y deseos”, explicó el jugador en declaraciones a medios nacionales.

Explicó que no fue sino hasta muy entrada la tarde que las directivas del equipo se comunicaron con él para notificarle la decisión de Fuad Char. Pero era algo que veía venir desde el último partido, cuando nadie se había comunicado con él en recientes días para adelantar planes para el 2017.  

“Uno intuye en la vida del fútbol. Era la nostalgia del último partido, de todo lo que faltó y creo que pudimos haber hecho un poquito más, pero hasta allí nos dio. Hubo muchos pensamientos en ese momento. En un momento dado no se había expresado nada hacía uno, uno intuye. Pero no como me enteré, que fue a través de los medios de comunicación. Nunca nadie me llamó, hasta las 4:00 de la tarde que me llamó el gerente”, dijo.

Igualmente, defendió su gestión, dando a entender que la campaña no fue tan mala como se hizo ver, pues faltó muy poco para clasificar a los play-off del torneo. Además dijo que impulsó las ventas de Vladimir Hernández y ganaron un lugar Enrique Serje y José Luis Chunga.

“En estos cuatro meses que estuve, se trabajaron las cosas bien. Se llegó a la final de la Copa Águila y solamente por el descuido y la cantidad de cosas que pasaron, nos faltaron 4 puntos para estar entre los 8 de Colombia. Además en este proceso se vende Vladimir, se potencia a Serje y creo que a Chunga también se le potencia en esos poquitos partidos que hace”, justificó.

“No es tan horrible como lo quieren hacer ver. A mi me tocó un equipo que nunca hizo una pretemporada, que no tenía la base importante. Hubo once partidos en que el equipo comenzó a trabajar bien y luego comenzó a decaer por problemas físicos. Eso no lo veían”, agregó.  

Dijo que se va agradecido con los hinchas, pero dolido porque nadie fue capaz de hacerle una llamada para notificarle su desvinculación.

“Me siento triste. Pero soy un agradecido de Junior y de los directivos por darme la oportunidad y el apoyo inmenso de la afición, porque a mi nunca me trataron mal. La afición se ausentó del estadio porque no habían los refuerzos que la gente quería ver y porque comparan con un equipo como Nacional. Me siento triste porque me di cuenta por los medios”, reiteró.

De su relación con los jugadores, solo pudo decir que tenía un inmenso agradecimiento.

“Me trataron muy bien, hubo un respeto mutuo. Eso me da entender que tengo buen manejo de grupo. No tuve inconvenientes, y si hubo uno fue en un entrenamiento, que fue algo completamente normal”, destacó.

Por último, dijo que nunca hubo lugar a indisciplinas durante su gestión, al menos no que él y sus colaboradores se hayan dado cuenta.  

“Lo digo con toda sinceridad, me voy a quitar el traje de entrenador y voy a hablar como si fuera un jugador: en todas las ciudades, al jugador de fútbol le gusta salir. Pero, yo llegué y no tuve problemas en ese aspecto. ningún jugador me llegó borracho. Siempre me decía que en tal sitio está este y este. Pero sí pasó algo, fue porque no me di cuenta”, cerró.

Junior se encuentra adelantando la gestión de contratar a un nuevo técnico, el cual podría ser extranjero.